En 16 años de matrimonio, Courtney y su esposo Chris han tenido 12 hijos.
Seis niños y seis niñas, cada uno con su propio carácter, intereses y talentos especiales. El bebé más joven nació hace solo seis meses, pero Courtney ya sueña con darle al mundo al menos dos hijos más.
El presupuesto es un desafío especial para una familia tan grande. Solo para lo más necesario, como alimentos, pañales y gastos domésticos, se gastan al menos 1300 dólares al mes.
Courtney compra ropa solo en rebajas, y su familia simplemente no va a restaurantes: incluso una cena sencilla en un café costaría sumas astronómicas para un grupo tan grande.
A pesar de todo, los niños no se sienten desfavorecidos. A diferencia de la mayoría de sus compañeros, no van a la escuela: Courtney y Chris se encargan de su educación.
Han desarrollado su propio sistema para hacer que el aprendizaje sea entretenido y emocionante. En lugar de sentarse aburridos en bancos escolares, sus hijos exploran activamente el mundo, participan en actividades prácticas y adquieren conocimientos de forma lúdica.
Viajar con toda la familia es un desafío especial. Un coche normal no es suficiente, así que los esposos compraron una enorme furgoneta de 15 plazas.
¡Solo se puede imaginar cuánto tiempo toma un simple viaje al supermercado o un picnic!
Sin embargo, no todos están de acuerdo con este estilo de vida. La madre de Courtney desaprobó desde el principio su deseo de tener una familia numerosa. Ella está convencida de que su hija no es capaz de dar suficiente atención a cada uno de los niños.
Sin embargo, Courtney está completamente en desacuerdo. Ella enfatiza que sus hijos siempre están cerca de ella, crecen rodeados de amor y cuidados, y que la falta de escuela y jardines infantiles solo fortalece los lazos familiares.
